Viernes, 14 de octubre de 2016.
De nuevo me levanto a las 5:30 para no perder el primer autobús, pero a diferencia del viernes pasado no me encuentro con una cucaracha para empezar bien la mañana, no, me corto un dedo con una cuchilla OTL Y no sé si fue por el estúpido corte, por el exceso de sangre o por el dolor absurdo que sentía pero en la teórica me dormía y en la práctica no daba pié con bola. El pobre chef debió acabar contento conmigo ._.
Para terminar de rematar la tarde mientras esperaba de nuevo el bus, maleta en una mano y portatartas bailando en la otra, se pone a llover. ¿Llevaba paraguas? Seguro que sabéis la respuesta. No, no llevaba. Y ¡oh! sorpresa, este autobusero no dejaba junto al metro, tocaba cruzar dos calles T^T
No lo he dicho pero la tarea del día era hacer un Pastel Succés, bien, el mío no fue ningún succès y encima llegó medio destrozado por el viaje. Al menos estaba bueno, o eso dicen... Y admitiré que hasta ese momento no sabía que tipo de tarta era esa, pero nada más ver que llevaba merengue cocido y crema de mantequilla con avellanas supe que no iba a ser para mí. Mi familia feliz claro.
Para finalizar el día pasado por agua y con los aires acondicionados a toda potencia en la cocina, lo único en lo que pensaba era en el plato de sopa caliente y la cama que me esperaban en casa después de una larga visita/consulta al hospital. No, no fue por mi dedo, seguía en busca de la vacuna perdida.
Besotes~~
P.D: Pondría alguna foto de la dichosa tarta pero google no sirve de nada en este caso, y la mía no sé ni como llegó xD
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